El Ministerio lanza una consulta pública para contribuir al Plan Nacional de 5G

martes, 18 de julio de 2017

La quinta generación de tecnologías de telefonía móvil, el denominado 5G, supondrá no sólo un incremento muy sustancial en cuanto a velocidad de navegación, sino que posibilitará la llegada de nuevos productos, servicios y aplicaciones. Para aprovechar al máximo el potencial de esta tecnología, el Ministerio de Industria, Energía y Agenda Digital (Minetad) desarrolla el Plan Nacional 5G, que ante todo pretende impulsar una implantación temprana de este tipo de redes en España, así como contribuir al desarrollo de la I+D+i en este ámbito.

  • 2017.07.18 5G

Se espera que la introducción del 5G tenga un importante impacto económico en sectores como la automoción, salud, transporte y servicios públicos, que en nuestro país podría traducirse en 14.600 millones antes de 2025.

Para desarrollar un plan acorde a las necesidades reales del país, el Minetad ha lanzado una consulta pública que permanecerá abierta hasta el 31 de julio. Su objetivo es recabar todas aquellas ideas, propuestas e información relevante que quieran aportar los interesados.

La consulta está estructura en 25 preguntas y está especialmente dirigida a Administraciones Públicas, empresas de distintos sectores, asociaciones de consumidores y usuarios y a la sociedad en su conjunto. Las cuestiones sobre las que se piden aportaciones están relacionadas con servicios y aplicaciones 5G, situación actual de la tecnología 5G, espectro radioeléctrico, prototipos de despliegue de red 5G y actuaciones de I+D+i, entre otras.

Todos aquellos que deseen participar deber remitir sus ideas y propuestas a la siguiente dirección de correo electrónico: consulta5G@minetad.es. Los términos de la consulta, así como las 25 preguntas, están disponibles en la web del MINETAD.

Los expertos en telecomunicaciones afirman que la tecnología 5G va mucho más allá de los servicios de telefonía móvil o de banda ancha móvil, y permitirá la prestación de una amplia gama de servicios y aplicaciones. Estas nuevas redes, por ejemplo, serán capaces de proporcionar banda ancha móvil de muy alta velocidad y capacidad, con velocidades de datos de 100 Mb/s para miles de usuarios en movilidad. También movilidad con picos de velocidad de 1 Gb/s y comunicaciones en interiores que soportarán varias conexiones de 1 Gb/s simultáneas, con una velocidad global superior a los 10 Gbit/s y picos de 20 Gb/s.

Además, las comunicaciones serán ultra fiables y de baja latencia (retardos de red), de en torno a 1 milisegundo frente a los 20‐30 ms propios de las redes 4G. Esta condición podría hacerlas apropiadas para aplicaciones que tienen requerimientos específicos en este ámbito, como el vehículo conectado o el vehículo autónomo, servicios de telemedicina, sistemas de seguridad y otros como la fabricación inteligente.

Cabe también subrayar la importancia de las comunicaciones masivas en el ámbito de Internet de las cosas (IoT), donde los dispositivos se conectan mediante las tecnologías inalámbricas 5G. Para ello se incrementará la capacidad para gestionar conexiones simultáneas, lo que permitirá entre otras cosas, el despliegue masivo de sensores. IoT tiene un ámbito de aplicación en multitud de campos (hogar, procesos productivos, prestación de servicios, edificios inteligentes, ciudades y territorios inteligentes, salud, logística, turismo, “wearables”…).

Un caso particular muy interesante es el del vídeo, donde se produce una mejora en la transmisión que permite incrementar las prestaciones en movilidad y en tiempo real, para acceder a contenidos de Ultra Alta Definición (UHDTV), con calidad 4K u 8K, realidad virtual, imágenes desde drones, realidad aumentada, etcétera.

Para poder proporcionar todos estos servicios con suficiente fiabilidad, tendrán que incrementarse las prestaciones de la red de acceso, para aumentar el ancho de banda disponible y la capilaridad. En este contexto, serán especialmente relevantes las estaciones de baja potencia, conocidas como “small cell1 ”. Asimismo, multitud de funcionalidades de la red, hasta ahora prestadas mediante equipamiento hardware dedicado, se ofrecerán mediante plataformas de software.

Fuente: Blog Red.es